El diagnostico de una enfermedad reumática crónica en
uno de los miembros de la familia genera cambios en la dinámica familiar y crea
muchas dudas sobre cómo adaptar el hogar a las nuevas necesidades del paciente,
incluyendo la relación con
las mascotas.
La verdad que hoy en día,
las mascotas no solo son animales de compañía, son un miembro más de la familia. Es muy
frecuente encontrar un miembro peludo en
los hogares. De hecho, para el año 2011,
más de la mitad de los hogares estadounidenses
tenían al menos una mascota, lo que representaba 144 millones de perros y
gatos.
Acorde con la
página web Especiepro, los latinoamericanos
nos encantan las mascotas. En 80 % de los
hogares de Argentina y de México cuentan por lo menos con una mascota, y
en el 75 % de los hogares brasileños se disfruta de la compañía no humana. Las
mascotas más queridas en orden de frecuencia
son los perros, gatos, hamsters, pájaros y peces.
Se ha propuesto que la tenencia de mascota es
beneficiosa para la salud por varios
motivos:
·
Disminuye la presión arterial al disminuir los niveles de cortisol, una
hormona relacionada con el estrés.
·
Reducen la soledad, aumenta los sentimientos de apoyo social y mejora el
estado de ánimo.
·
Aumenta la actividad física al pasear al perro.
·
Reducción del estrés al contemplar una pecera.
¿Qué
pasa con mi mascota, si tengo artritis?
Además de las alergias, ¿Existen otras preocupaciones
adicionales al tener una mascotas, si tengo una condición reumática? En la consulta telefónica con una joven paciente, me
sorprendió el comentario de su mama: “Pregúntale a la doctora, ¿Si puedes tener
mascota y que tipo de mascota puedes
tener?”
Les confieso que en el
momento no tenían un respuesta cierta. Por tal motivo me dedique a buscar los
beneficios y amenazas que representan tener una mascota.
Es una pregunta
interesante e importante en contexto de un diagnóstico de una condición de
naturaleza autoinmune como lupus, sjogren, artritis reumatoide, o vasculitis,
entre otras. Las alteraciones inmunológicas propias de la enfermedad junto con
el tratamiento inmunosupresor supondrían un riesgo aumentado de infecciones, y
mantener un contacto estrecho con los animales aumentaría las oportunidades de
complicaciones infecciosas en los pacientes.
Desde este punto de
vista, la presencia de una mascota representaría una amenaza para el paciente
inmunosuprimido y se debería evitar su tenencia en estas condiciones, como los
pacientes que reciben esteroides a altas dosis, inmunosupresores, pacientes con
HIV/SIDA o con quimioterapia en contexto del diagnóstico de cáncer.
Sin embargo, la realidad
muestra una tendencia distinta. Acorde
con la publicación de la Revista Chilena de Infectología del año 2013, se reportó la
presencia de mascotas en 58% de los hogares de sujetos inmunocomprometidos (
pacientes con HIV/SIDA, paciente en quimioterapia con inmunodeficiencia) tanto
adultos como niños, siendo la gran mayoría perros y gatos, seguidos de aves y
mascotas exóticas. Es importante de de destacar que no fue posible encontrar
cifras de la tenencia de mascotas en paciente con condiciones reumáticas.
La opinión de los expertos
en área de infectologia aconsejan no
tener mascotas cerca si presenta alguna condición de salud que
comprometa la integridad del sistema inmunológico.
Antes de llevar una mascota a casa, consulte
al médico veterinario. Su participación debe involucrar los aspectos
del área clínica y la sanidad animal, la nutrición y la educación a
propietarios sobre el manejo de la mascota.
La tenencia responsable comprende una
alimentación adecuada, vacunaciones y desparasitaciones según planes de manejo,
disponibilidad de tiempo para pasear al animal, el aseo cotidiano y las
actividades de recreación del animal.
Si decide
conservar su mascota, después del diagnostico de cualquier condición médica que
genera inmunosupresión, usted y su familia deben ser conscientes del riesgo de
contraer enfermedades que se pueden transmitir de los animales a los humanos. A
continuación algunos consejos de los expertos:
·
Solicítele información al veterinario
sobre las infecciones que usted podría contraer de sus mascotas.
·
Haga que el veterinario examine a todas
sus mascotas para buscar enfermedades infecciosas.
·
Lávese bien las manos después de
manipular o tocar a su mascota, limpiar su caja de arena o eliminar sus heces.
Lávese siempre antes de comer, preparar alimentos, tomar medicamentos o fumar.
·
Mantenga a la mascota limpia y
saludable. Verifique que todas las vacunas estén al día.
·
Si está pensando en adoptar una
mascota, debe conseguir una que ya tenga más de 1 año de edad. Es más probable
que los gatitos y los cachorros rasguñen o muerdan y también son más propensos
a contraer infecciones.
·
Procure hacer castrar o esterilizar
quirúrgicamente a todas las mascotas. Los animales esterilizados probablemente
vagarán menos y por ello será menos probable que contraigan enfermedades.
·
Lleve a su mascota al veterinario si
presenta diarrea, está tosiendo o estornudando, tiene poco apetito o ha bajado
de peso.
·
En pocos casos, los perros pueden
transmitir la tos de las perreras a personas con sistemas inmunitarios
debilitados. En lo posible, No lleve al perro a una residencia canina ni a otro
ambiente de alto riesgo.
·
No adopte animales salvajes ni
exóticos. Es más probable que muerdan. A menudo portan enfermedades poco
comunes pero graves.
·
Los reptiles son portadores de un tipo
de bacteria llamada salmonela. En caso de tener un reptil, use guantes de goma
al manejar el animal o sus heces, ya que la salmonela se pasa muy fácilmente
del animal a los humanos.
·
Use guantes de goma al manipular o
limpiar las peceras.
Los beneficios
para la salud superan con creces las amenazas de tener una mascota en casa,
siempre y cuando se manejenla buenas practicas de una tenencia responsable. Las mascotas
han demostrado tener un efecto psicológico y emocional importante en los
pacientes, lo que ha permitido hacer de las enfermedades crónicas algo más
llevadero, e incluso, se pueden convertir en facilitadores de la recuperación
de algunos casos. Su afecto
incondicional, los convierten en sanadores silenciosos.
Mascotas y
fibromialgia
La fibromialgia es una condición médica que pertenece al grupo de
síndrome de sensibilización central, donde ocurre una desregulación en los
mecanismos de control de dolor. La fibromialgia se caracteriza por dolor
crónico generalizado acompañado de trastornos del sueño, trastornos cognitivos
y trastornos emocionales que afecta severamente la calidad de vida quien lo
padece.
En el tratamiento de la fibromialgia se combina una serie de estrategias
farmacológicas y no farmacológicas para
inducir alivio del dolor. Sin embargo, el día a día del paciente con
fibromialgia puede ser resultar un poco duro o abrumador para el paciente.
En este escenario, Nancy Gordon paciente con fibromialgia y
osteoartritis, en el año 1999 conoció una raza de perro originaria de México, llamada xoloitzcuintli o perro azteca o perros
Xolos.
Esta raza de
perro tiene la particularidad que su
carencia de pelo hace que se sientan como almohadillas calientes. Algunas
personas, especialmente aquellas con problemas musculoesqueléticos, son
atraídas por esta raza por su capacidad de calentarlas.
Nancy adopto
se perro azteca "Toaster" y se
anotaron en un programa de dos años de la Universidad del Sur de California que
entrena a perros de asistencia. Al final del programa, Toaster respondía a una diversidad
de órdenes: iba por las tarjetas de crédito, el teléfono, el correo y otros
objetos, e incluso ayudaba a Nancy a ponerse los zapatos y a quitarse el
suéter. En el año 2008 Nancy Gordon creo la fundación Xolos para el Alivio del Dolor
Crónico, dedicada a entrenar perros aztecas y ubicarlos como perro de
asistencia de pacientes con fibromialgia.
En
la revista Animal health se relata la
experiencia de Fud Therapy
con perros de la raza pastor alemán y con pacientes que sufren fibromialgia. Al
animal se le enseña a poder canalizar todo el flujo emocional y a poder
controlar la respiración para compasarla con la del paciente y poder llegar a
reducir la ansiedad y el estrés.
Los
perros que se dedican a esta terapia están entrenados exclusivamente para
ayudar a enfermos con esta dolencia. “Tenemos otros perros más versátiles que
realizan más de un proyecto y hay otros que se especializan, en el caso de la
fibromialgia hay un perro exclusivo para este proyecto”, determina la
directora de la fundación.
Mascota y artritis reumatoide.
Una historia
interesante, es la Jaci Sweet paciente con artritis reumatoide y fibromialgia y su
perro de asistencia Wolf. Jaci dice que
si están en el supermercado, Wolf le ayuda a sacar los artículos de los
estantes de abajo, además de jalar el carrito y, si se llegara a caer,
auxiliarla para que se levante de manera segura.
Esta historia inspiradoras de Toaster, Wolf y
de la fundación Fud Therapy forma parte de los que es conocido como Zooterapia.
La
interacción con las mascotas puede realizarse en tres modalidades: que las
mascotas sean usada como animales de compañía en casas o centros de atención,
que visiten dichos centros y ayuden en la estimulación de los pacientes, o que
visiten hospitales como una actividad enmarcada dentro de un programa
terapéutico o como visita aislada.
Las
visitas terapéuticas de mascotas o terapia asistida por mascotas, es definida
como un programa de intervención, dirigido por un miembro del equipo de salud
especialmente capacitado, donde un animal que reúne condiciones físicas y
sociales, forma parte integral de un proceso de rehabilitación o tratamiento.
Se
han reportado múltiples beneficios de la zooterapia o terapias asistida por
mascotas en área de estimulación psicomotor, social y educativa como:
·
Mejora el fortalecimiento de músculos,
las destrezas motrices
·
Mejora la coordinación y favorece al
incremento de la fuerza muscular
·
Mejora la motricidad fina gracias a
movimientos como acariciar, arreglar, darle de comer, etc.
·
Mejorar el estado de ánimo
·
Antídoto para la depresión y la
monotonía
·
Disminuye la ansiedad y el estrés
·
Fomentan el contacto social y físico
·
Sirve como incentivo y motivación
·
Es agradable para el paciente
·
Crean un vínculo positivo
En conclusión, los
beneficios de tener una mascota superan las amenazas que pondrían suponer su
presencia alrededor de un paciente inmunocomprometido. No existe una mascota
ideal para todos, depende de nuestras
creencias, visión de vidas, posibilidades de atención. Los más importante de
destacar siempre es la tenencia responsable, por el bien del paciente y por el
bienestar del miembro no-humano de la familia.
Referencias
ihttp://www.scielo.org.co/pdf/rccp/v20n3/v20n3a16.pdffinal
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Recuerda sus preguntas son importantes en este proceso de aprendizaje y comunicacion.
Sin embargo, los comentarios aqui desplegados no sustituyen la consulta medica. Queremos alentarlos a estrechar vinculos con su medico tratante y que se sientan confiado en preguntar los detalles de su diagnostico y tratamiento con quien mejor conoce su historia, su medico tratante.